La fórmula que define el mercado editorial independiente de estos años tiene fácil resumen: convertir cualquier aspecto de la vida moderna en revista molona, pero hacerlo con papel bueno y buscándole un lado estiloso / cultural / alternativo. Así, la cocina se revoluciona con Lucky Peach o The Gourmand, el fútbol se hace cultura con Líbero y… ¿los animales?

Los animales ya estaban tardando.

En los últimos meses han surgido tres revistas de guau y miau. No he tenido todavía ninguna entre mis manos pero, en fin, sólo la ideaca ya merece una reseña.

En el apartado «miau»: Puss Puss, recién lanzada desde Londres y que se define como «una publicación estilosa sobre cultura, moda, música y amantes de los gatos». Su primera portada está protagonizada por el tatuaje labial de la modelo Anja Konstantinova, e incluye un reportaje sobre el artista chino Ai Wei Wei y los 30 felinos que viven en su casa de Pekín.

Por otro lado, Cat People: nacida en Melbourne en septiembre de 2013 y que dedica sus 146 páginas a «entrevistas y trabajos de artistas, diseñadores, fotógrafos y escritores obsesionados con los gatos». Es una revista hábilmente bilingüe en inglés y japonés.

Y en el apartado «guau», Four & Sons, también publicada desde Melbourne. Lo que empezó siendo sólo una publicación online se ha trasladado al papel con una redacción esparcida por todo el mundo. El primer número es de primavera de 2014, está impulsada por la diseñadora Marta Roca y viene a ser «dónde se encuentran los perros y la cultura».

¿Tentadoras, no?

Heraldo de Madrid, fundado en 1890, llegó a ser uno de los periódicos más vendidos de España, líder de opinión, referencia. Esas cosas. Se erigió durante los años 30 en un firme defensor de la República, y no es de extrañar que en los últimos días de la Guerra Civil, en plena toma de la capital por las tropas nacionales, un comité falangista entrara armado en la redacción para incautárselo (y para cerrarlo).

Esa fue la primera muerte.

La sede y los talleres pasaron a manos del escritor Juan Pujol, que lanzó en ellas el vespertino Madrid. Lo que venía a ser un botín de guerra periodístico cambió de manos en los años sesenta, y la nueva propiedad impulsó una línea crítica con el régimen franquista que trajo consigo numerosos problemas con la censura y, en 1971, la prohibición del periódico.

Y esa fue la segunda muerte. O segundo asesinato.

En fin: el caso es que este pasado fin de semana el Heraldo renacía de sus cenizas, por decirlo en plan metáfora barata, con una edición conmemorativa que se venderá durante todo el mes de abril. Detrás del proyecto hay una especie de «confederación» de algunos de los medios independientes que han ido surgiendo en los últimos tiempos, entre los que se encuentran eldiario.es, InfoLibre, Mongolia, Materia, Líbero, La Marea, Fiat Lux, Jot Down…

Y siempre es una alegría que nazca un periódico.

La crisis de los medios impresos ha dejado, como saben, una gran cantidad de talento editorial libre por el mundo. Y mucha gente con eso tan genérico pero tan maravilloso que se define como «ganas de hacer cosas».

Un ejemplo: la nueva revista mensual Don. Con el lema levemente ambiguo «Cultura popular para mayorías selectas», ha nacido para el mundo de las tabletas capitaneada por Rafael Benitez (ex de FHM y de GQ) y Javier Moya (que llevaba el mundo internetero de, por ejemplo, Esquire).

La historia no es nueva: pequeña revista editada sólo en píxel lanzada por un equipo lleno de ilusión y que espera ganarse el pan con descargas gratuitas y el maná de la publicidad. La diferencia, en este caso, viene del currículum del equipo responsable, que está muy bregado en el mundo de las revistas, y de la calidad, muy alta, del resultado final.

Digamos que Don es una revista bien hecha.

El diseño tiene una atención al detalle y a la tipografía por encima de la media (en papel o en pantalla). Los contenidos están llenos de ideas, y trabajados a lo grande, y con humor. En fin: que tendrá detrás a un pequeño equipo editorial, pero su contenido no desmerece a las revistas editadas por las grandes empresas.

Tiendo a despistarme en cuanto una revista para iPad tiene mucha interactividad o momentos dinámicos. Y Don ha echado el resto en ese aspecto: hay scrolls por todos lados, textos que aparecen cuando tocas una cifra, pop ups, animaciones, videos y demás. Un arsenal de recursos lleno de fuerza, deslumbrante. Exprime al máximo las posibilidades de Aquafadas, una plataforma de «digital publishing» que parece una alternativa solvente (y mucho más barata) a las suites de Adobe.

Resulta un poco abrumadora en ese aspecto, y soy de la teoría de que tanto «pincha en cada objeto para ver su crédito» es divertido (una vez), pero exige demasiado del lector –hay que dar muchos pasos para llegar al contenido– y hace que la lectura no sea fluida. Así, mi página preferida es la sección «La ruta 11», que se configura en un despliegue vertical de contenidos espectacular. [Está ahí abajo].

[Actualización] El diseño es obra del estudio Rodríguez y Cano, veteranos de la división de revistas de PRISA. De ellos es el mérito gráfico de Don. Les preparé tres preguntas cortitas, porque tenía alguna curiosidad sobre el proceso, y han sito tan amables de responder. Así son los diseñadores: que les preguntas, y responden.  (¡Gracias!)

01. Como diseñador de papel me asomo al mundo de diseñar para tabletas con un poco de aprensión. ¿Cómo habéis vivido la transición entre uno y otro mundo? Además del reciclaje puramente técnico, ¿hasta que punto es difícil el cambio?
Hemos entendido esa transición como algo natural. Todo lo que hemos aprendido durante tantos años haciendo revistas en papel lo aplicamos a todo lo que diseñamos, sean revistas digitales, webs o Apps. Lo más complicado es familiarizarse con los tamaños de las tipografías. Una vez que controlas la herramienta el cambio es más sencillo de lo que parece. Nosotros seguimos siendo fieles amantes de las revistas en papel pero entendemos que en algún momento tendíamos que probar en la versión digital. Hemos saltado al otro lado y nos ha parecido de lo más divertido.

02. Don es un despliegue de recursos  y animaciones. De todos los recursos con que cuenta el diseño de tabletas, ¿cuáles funcionan mejor?
En nuestra opinión, los vídeos. Con ellos tu revista puede convertirse en un canal de televisión.

03. Tengo entendido que habéis usado la herramienta de producción de Aquafadas. ¿Qué diferencias tiene con las de Adobe? ¿Se integra bien con InDesign?
Sí, la integración es perfecta. Es un plugging sencillo e intuitivo. Rápidamente asimilas dónde están los límites de lo que te permite hacer.

En fin: que les recomiendo echar un ojo a la revista, todos los meses. Promete grandes cosas.

The Guardian lanzó hace un par de semanas una nueva revista semestral dedicada al mundo de la moda y que se llama, ejem, The Fashion. He tardado un poco en echar mano a un ejemplar, y aquí les traigo unas imágenes.

El director creativo del periódico, Alex Breuer, ha estado al frente del invento, que basa su diseño sobre todo en el uso de una nueva tipografía, Guardian Fashion. Les diré que las tipografías condensadas en todo versales son tendencia. Avisados quedan.

En el interior hay páginas de gran elegancia (como alguna apertura de reportaje, con homenajes a las siluetas pequeñitas de los especiales del Elle UK), y también cosas más de catálogo compartimentado. Pero el conjunto resulta bastante bien armado.

Me llama la atención la portada, un poco estática y dominada por una cabecera en blanco, como si fuera una cosa deliveradamente antigua.

Desde hoy asistimos a la resurrección en el quiosco de uno de los hitos periodísticos de los años noventa: el fugaz semanario Noticias del Mundo [Twitter], que desapareció en 1995 después tan sólo cuarenta semanas de vida, pero cuyas exclusivas –»Nieves Herrero es una extraterrestre», «La mujer con tres cerebros»– marcaron a toda una generación. [Para recordar, aquí hay un Flickr lleno de portadas.]

La revista era (y es) la edición española de la publicación americana Weekly Word News. Sepan que, en la película ‘Men In Black’, el agente K (Tommy Lee Jones) decía de ella que tenía «el maldito mejor periodismo de investigación del mundo». Ahí es nada.

En fin: bajo el lema «Insólito – Asombroso – Real», promete las mejores exclusivas que el periodismo pueda conseguir. Otro día podríamos discutir, desde el punto de vista del diseño gráfico, si la maquetación deliberadamente desmelenada de sus páginas contribuye al efecto humorístico de los titulares. Soy partidario, por cierto, de los tremendos titulares en Futura. De momento, voy a dejarme llevar por titulares como «El pueblo donde todos tienen la cara de Urdangarín» o «Paula Vázquez es Rubia Natural». Y por hay páginas como estas:

Hello Mr. es una interesante revista australiana sobre «hombres que se citan con hombres», o sea, el público gayer. Pretende ser una cosa tirando a selecta.

Hay una fórmula aplicada por muchas revistas independientes que encuentran su sitio buscando los nichos más hípsters y culturetas del mercado. Así, las nuevas revistas de cocina –Put an Egg on It, Lucky Peach…– se lanzan a por los gourmets más selectos, mientras publicaciones como Líbero buscan al lector futbolero que huye del forofismo de la prensa diaria y títulos como The Ride persiguen al ciclista selecto. Tiene toda su lógica: hay que diferenciarse de los medios más generalistas.

Hello Mr. hace algo parecido: un formato reducido, un diseño bastante sencillo pero cuidado, en la línea de revistas como Apartamento, y cero lentejuelas o banderas arcoíris. Como detalles de diseño, me quedo con su restringida paleta tipográfica, su apertura en negro muy cercana al concepto libro, la participación del ilustrador barcelonés Alfonso Casas.

Unas páginas.

Graphiclassic es una aventura editorial nacida a lomos de una maligna criatura marina y un buque llamado Pequod. Con el colorido de una revista y la paginación de un libro, este cruce de formatos se inaugura con un estudio literario y gráfico de la novela Moby Dick.

La idea: reunir un buen puñado de firmas e ilustradores para repasar y poner de actualidad un clásico literario. Un trabajo casi enciclopédico que se hojea con placer.

La portada del primer número es de Ricardo Martínez, genio del dibujo donde los haya.

Ah: me ha encantado encontrar una referencia a la versión cómic de la colección «Famosas Novelas». Con ellas  me acerqué, cuando moceaba, a Melville, Dickens y otros clásicos…

En este mundo editorial acelerado en el que nos ha tocado vivir, los medios impresos se esfuerzan por potenciar sus versiones interneteras al grito de «el papel se muere», y los medios nacidos en la web se lanzan en tromba a publicar nuevas versiones en tinta y papel de sus contenidos pensando aquello bonito de «el papel tiene su punto».

Es una situación irónica, ciertamente. Al final, tratar de pronosticar con plazos afinados el futuro del mundo impreso resulta poco menos que imposible. No tenemos perspectiva ni serenidad. Hay tantas opiniones, datos y tendencias contradictorias que predecir qué pasará con la prensa hecha con árboles muertos –una expresión lúgubre y acertada– se acerca más a la astrología que a la ciencia. Como elegir con antelación de meses entre «hará sol» o «habrá lluvia» en una ciudad cualquiera.

Yo tengo mis teorías, claro, que para opinar todos somos libres: el papel morirá, pero no del todo; la prensa impresa vivirá, pero puede que no los diarios. Y para todo ello faltan unos cuantos años.

También tengo mis preferencias: me gusta hojear revistas en papel, pero paso más tiempo frente a la pantalla. Y me flipan las revistas en tableta, pero me gustan más cuánto más se parecen a su versión impresa. Maniático que soy.

En fin, a lo que íbamos: webs que se pasan al papel en plan «publicación premium» para afines y para dar prestigio y presencia de marca. La revista digital de «cultura contemporánea» Jot Down ha trasladado parte de sus contenidos a una tremenda revista de papel, e incluso reunió los de otras cuatro webs en el spin-off Five. El diario web infoLibre tiene en tintaLibre una versión mensual y papelera. It’s Nice That, una diseñística web inglesa, ha lanzado hace poco Printed Pages…

La última incorporación a este mundo impreso ha sido Cuadernos de eldiario.es. Lo mejor de su diseño: un uso intenso y extenso de las ilustraciones que le da una personalidad muy interesante a la revista. También que tiene un montón de pequeños detalles de diseño. Salvedad: en ocasiones, tienen tanto protagonismo que se meriendan un poco el contenido.

Un aspecto estructural que me ha llamado la atención (y que me parece fallido): las páginas de Cuadernos están llenas de blancos, todo muy esponjado y suelto. La sensación que me da no es de alivio, sino de que sobra espacio o falta contenido. Es sólo una teoría personal, pero creo que este tipo de revistas premium en plan «tratamos el tema a fondo» – en este caso, el fin de la España de la Transición– deberían causar la misma impresión que uno recibe cuando hojea The New Yorker: que la redacción tiene tanto que decir, y todo tan importante, que cada centímetro cuadrado de papel vale su peso en oro. Y no.

Aquí van unos detalles.

La edición española de Forbes llegó a los quioscos hace unas semanas, como ya comenté por aquí. La de arriba es la portada de su segundo número, que sale ahora.

Tenía pendiente compartir algunas páginas de su número inaugural. En realidad, su diseño no tiene mucho que ver con la publicación original, y tiene más que ver con otros modelos más dados al lujo gráfico, del tipo Fortune o, mismamente, Esquire, cabecera señera de entre las de Spainmedia Magazines, la editora en España.

Me repito a mí mismo: las páginas de Forbes están repletas de hermosos detalles de diseño, y todo tiene un aire de periódico lujoso y retro que me ha gustado mucho. Tipografías: Clarendon, con todo su aire clásico, Din, Big Noodle y Horley para el texto general.

El director de arte, Ángel Perea, responde a un par de preguntas:

1. ¿Cómo habéis equilibrado, desde el diseño, que Forbes esté a mitad de camino entre la revista de economía y el mensual de estilo de vida?
La verdad que nos hemos arriesgado. En el mercado no habia ninguna revista así. Pero en Spainmedia tenemos la suerte de hacer una de la mejores revistas de estilo de vida, Esquire, y Spainmedia se ha apoyado en esa experiencia. El mayor problema resultó ilustrar ciertos temas económicos: verdaderas comeduras de cabeza. Buscamos un enfoque diferente para que quien no sea experto en economía pueda leer Forbes y la tenga como compañera de viaje de negocios, pero también en viajes vacacionales.

2. ¿Cuáles han sido tus fuentes de inspiración a la hora de crear la maqueta de la edición española? ¿Qué elementos la hacen única entre otras ediciones de la revista?
Fast Company, Fortune, Rolling Stone (la que se publicaba en los primeros años del 2000), Bloomberg Businessweek… Todas ellas americanas. Eso es lo que la hace diferente a otras versiones: el diseño tipico americano. Otras ediciones de Forbes tienen un diseño más económico. Otra gran diferencia es la edición gráfica: buscamos que los CEO y grandes empresarios salgan con un toque especial. Y también nos hemos inspirados en grandes fotógrafos americanos.

Tres lanzamientos recientes recién llegados a los quioscos selectos:

Five lleva ya unas semanas en la calle. Es una idea curiosa: con un formato muy parecido a la versión papelera de la revista Jot Down, reúne algunos de sus textos más contenidos de otros cuatro blogs: Yorokobu, Diario Kafka, Naukas y Politikon. 

Tinta Libre es un spin-off en papel de InfoLibre, el nuevo diario digital liderado por Jesús Maraña (último director de Público) y que tiene en su equipo a los ninjas de la información que formaban el corazón de la sección de Política de aquel periódico. Gran formato, papel prensa y largos reportajes, que lo sepan.

Forbes es el último lanzamiento de Spainmedia Magazines. Información económica, moda y consumo en una publicación que resulta un curioso cruce entre Fortune y Esquire. Las páginas están repletas de hermosos detalles de diseño, y todo tiene un aire de periódico lujoso y retro que me ha gustado mucho.